Illia Golem, el culturista que pone en juego su vida por un físico viral

Illia Golem se ha convertido en el hombre viral del momento, y no por ser un ejemplo a seguir exactamente, o al menos no se debería considerar como tal. Podríamos decir que es uno de los culturistas más sorprendentes a nivel mundial, aunque no llama tanto la atención por su aspecto físico, sino porque el culturista checo come una media de 16.000 calorías diarias.

ElDesmarque ha contactado con Jorge Gómez, miembro de la Federación Española de Entrenadores Personales y Fitness (FEEPYF), para explicar hasta qué punto Illia Gómez está poniendo en riesgo su salud.

Antes de profundizar, tal y como ya hemos comentado en artículos anteriores, cualquier deporte llevado al extremo deja de ser bueno para la salud.

Una gran parte de las 16.500 calorías son proteínas

Lo primero que le ha llamado la atención al entrenador personal, también experto en nutrición, no es tanto las calorías diarias que ingiere , aunque "exceda la cantidad recomendada estratosféricamente", sino que gran parte de estas son proteínas.

El hecho de consumir más proteínas de las necesarias de forma habitual "puede provocar daños en los riñones y en el hígado ya que si no se utilizan ", apunta Jorge.

Jorge ha explicado a ElDesmarque que el hecho de consumir más proteínas de las necesarias de forma habitual "puede provocar daños en los riñones y en el hígado ya que si no se utilizan".

En el artículo 'Las dietas hiperproteicas y sus consecuencias metabólicas', la nefróloga Michelle López Luzardo refleja que las "dietas de alto contenido en proteínas y bajo contenido de frutas y hortalizas, generan una cantidad importante de ácidos, principalmente en forma de sulfatos y fosfatos".

Esto significa que "el riñón responde a esta sobrecarga ácida con un aumento en la excreción ácida neta en forma de amoniaco y acidez titulable". El hueso también "contribuye a esta respuesta con su función amortiguadora mediante la resorción ósea -proceso por el cual las células denominadas osteoclastos eliminan tejido óseo liberando minerales-, con el consecuente incremento en la excreción urinaria de calcio".

Todos estos procesos suponen un trabajo extra al sistema renal al tener que eliminar gran cantidad de sustancias.

Inyecciones de insulina con fines anabolizantes

Respecto al excesivo consumo de proteínas, el entrenador personal puntualiza que "al utilizar drogas esteroideas -con su aspecto puede deducirse que las usa- su nivel de proteínas tiene que estar mucho más alto que el de una persona normal".

Además, en el vídeo de su canal 'Monster diet of ILLIA Golem', dice que para poder comer grandes cantidades de comida de forma muy seguida se inyecta "50 unidades de insulina". Él mismo admite que es una práctica muy peligrosa que incluso puede ocasionarle la muerte.

El objetivo que se pretende conseguir cuando se consume insulina rápida, es decir, a través de inyecciones, sin ser diabético, es aumentar la masa muscular y la fuerza, según el artículo 'Autoadministración de insulina en deportistas no diabéticos'.

"La insulina es un arma, hace más daño que bien" Guadalupe Blay, responsable del grupo de trabajo de Endocrinología y Nutrición de la Sociedad Española de Médicos generales y de Familia (SEMG).

La médico añade que "cuando comemos, nuestro páncreas genera insulina, pero si metemos más comida de la debida -como sucede en este caso-, necesitamos meter más insulina para que el cuerpo sea capaz de utilizar la glucosa como fuente de energía".

El abuso de carnes rojas compromete al sistema cardiovascular

En el reportaje para Men's Health cuenta cómo es su día a día, sus entrenamientos y sus siete comidas. Dos de estas comidas incluyen más de un kilogramo de ternera, es decir, carne roja, la cual, según el Ministerio de Sanidad, debe consumirse con moderación.

El National Institute of Health de Estados Unidos también reportó tras una investigación que "el consumo elevado de carnes rojas, procesadas y sin procesar, se asocia con un mayor riesgo de mortalidad prematura y mortalidad específica por cáncer, enfermedades cardiovasculares, enfermedades respiratorias, diabetes tipo 2, infecciones, enfermedad renal, enfermedad hepática".

Exceder el consumo de sal puede dañar los riñones

En ese mismo vídeo también apunta que le gustan las comidas sabrosas con bien de sal. El abuso de esta sustancia "es un factor de riesgo para desarrollar hipertensión arterial, problemas en el corazón -insuficiencia cardiaca, infartos-, hemorragias cerebrovasculares, daño en riñones que llevan a la insuficiencia renal e incluso la posibilidad de presentar cáncer gástrico o colorrectal, entre otros", detalla el Instituto Mexicano Del Seguro Social.

Teniendo en cuenta que Illia Golem está poniendo en riesgo su salud, ¿Qué puede llevarle a seguir con este tipo de vida?

Jorge Gómez lo tiene claro. "El problema de esto lo tenemos nosotros, la sociedad, porque cada vez queremos gente más fuerte, más rajada, más grande, que mueva más kilos... este hombre es así, aún sabiendo que se está jugando la vida, porque tiene gente detrás que le sigue".