Oriol Romeu está empezando a preocupar al FC Barcelona. Tras su llegada al club este verano, parece que su juego ha ido de menos a más. Durante los primeros partidos de la temporada sí se le vio motivado y dando lo mejor de sí mismo, sin embargo tras el partido contra el Celta no ha levantado cabeza.
¿A qué se debe esto? En el vestuario azulgrana piensan que se trata de un bloqueo mental por parte del futbolista, ya que talento y cualidades para jugar en el Barcelona tiene de sobra, según ha publicado el diario As.
Javier Soriano, psicólogo deportivo con experiencia en la cantera del Real Madrid, ha explicado a ElDesmarque hasta qué punto es posible que Oriol Romeu esté pasando por una mala racha debido a una falta de seguridad y confianza.
"Cuando estaba en la cantera, los chicos que entraban y no daban la talla que se esperaba de ellos se llenaban de frustración, rabia, impotencia, inseguridades...Son cosas que ocurren con mucha más frecuencia de lo que pensamos", asegura el profesional.
Oriol Romeu entró en la cantera del Barcelona en 2004 y antes de marcharse al Chelsea, disputó dos partidos oficiales con el primer equipo, al frente de Pep Guardiola. Doce años después, y tras convertirse en una pieza clave en el Girona ha vuelto al club que le vio crecer.
El hecho de pasar de ser la estrella del equipo, como era en el Girona, a convertirse en uno más, en uno de los mayores clubes del país, es un cambio que a muchos jugadores les puede afectar, asegura el psicólogo deportivo.
"Después de demostrar en el Girona lo que vale, ahora tiene que volver a hacerlo en el Barcelona", con la presión que eso supone. "Es normal que ellos mismos piensen si realmente merecen o no esa oportunidad", añade Soriano.
De hecho, al pasar de un equipo más humilde a otro de mayor relevancia, el síndrome del impostor suele aparecer en mucho jugadores, confirma el mismo.
Javier Soriano explica que probablemente cuando Oriol Romeu estaba en el Girona, su entrenador y sus compañeros confiaban plenamente en él y la afición le respetaba e incluso le alababa.
Sin embargo, al pasar ahora al club azulgrana, tiene que ganarse desde cero la confianza del entrenador y de sus compañeros. Además, en la posición de mediocentro que él ocupa, se necesita mucha personalidad y potencial para brillar, cosa que en el Girona hacia sin problema.
Teniendo en cuenta que últimamente ha tenido pérdidas de balón importantes, su afición se lo habrá hecho saber a través de algún que otro pitido, además de la presión mediática que conlleva jugar en un equipo de dicho calibre.
Este cúmulo de factores hace que "te entren las dudas y tú mismo te sientas con falta de confianza", asegura Soriano.
El profesional indica que para tratar este tipo de situaciones, "lo primero que tienen que hacer es una cura de humildad y reconocer todas las dudas". Sin embargo, el principal problema que suelen tener los jugadores es que no quieren reconocer esa debilidad, porque piensan que el hecho de hacerlo les va a volver más débiles aún.
"Aunque en realidad sucede todo lo contrario, el reconocerlo te va a hacer más fuerte ya que te va a permitir fluir y trabajar la autoconfianza", explica el psicólogo deportivo.
Una vez que el deportista, en este caso el futbolista, verbaliza lo que le sucede esta falta de confianza no se soluciona con palabras sino "poniéndole retos y objetivos de rendimiento que le hagan ver que va mejorando. De esta forma, vas poco a poco confiando en ti mismo", concluye Soriano.