A pesar de la creencia de que el grupo más afectado por la soledad son las personas mayores, los datos reflejan que esto no es del todo cierto sino que son los adolescentes y los jóvenes.
El estudio, elaborado por el Foro de Expertos del Instituto Santalucía bajo el título "Informe sobre la soledad no deseada en personas mayores" ha registrado que los adolescentes y los jóvenes son los grupos de edad más afectados por la soledad, en un 21,9%, frente a las personas con más de 75 años, un 12,2%.
Dicho trabajo subraya que las personas con discapacidad, las cuidadoras, los inmigrantes o los retornados, entre otros, son especialmente susceptibles de sufrir este problema.
El informe revela que un 87,2 % de los españoles considera que la soledad no deseada afecta sobre todo a personas mayores, y se debe, principalmente, a la falta de convivencia y apoyo familiar o social, especialmente por el hecho de residir lejos de la familia.
También, la presión laboral, el tener mucho trabajo y poco ocio, o incluso la falta total de estabilidad profesional son determinantes, en la población en general, mientras que para los mayores de 75 años, factores como la jubilación, la viudedad y problemas de salud incapacitantes contribuyen significativamente a generar este sentimiento.
“Existe una España solitaria, que sufre de aislamiento social y que necesita ser comprendida y, sobre todo, atendida”, advierte Josefa Ros Velasco, investigadora del Foro de Expertos, al alertar de que hay que prestar especial atención a este problema porque los sentimientos continuos de sentirse solo, alejado o separado de los demás puede prolongarse y desembocar en soledad no deseada crónica.
El estudio indica también que la soledad genera trastornos del estado anímico como la ansiedad -prevalencia del 37,8 %-, depresión -prevalencia del 39,3 %- y trastornos conductuales como la violencia, el alcoholismo o el suicidio, entre otros.
En términos económicos, la soledad no deseada implica un coste anual de 14.141 millones de euros para España, equivalente al 1,17% del PIB en el año 2021.
Además, el gasto en servicios sanitarios, especialmente en médicos especialistas y urgencias, asciende a 5.605 millones de euros anuales.
A esta cifra hay que añadir el gasto en consumo de medicamentos, destacando tranquilizantes y antidepresivos, con un coste adicional de 495 millones de euros.
En conjunto, los costes sanitarios alcanzan los 6.101 millones de euros anuales, equivalente al 0,51% del PIB español.