Jorge Martín, tras conseguir su primer podio en el Gran Premio de Portugal, admitió que "tenía dudas de mi desde el año pasado, tenía miedo a perder y por fin he vuelto a ganar". Esta situación ha conseguido superarla gracias al trabajo de su psicólogo deportivo, tal y como también apuntó el piloto. "Hemos trabajado mucho estos meses para tener menos dudas y controlar las cosas, estando más tranquilos. Ahora se en qué pensar durante la carrera", confesó.
El miedo a perder no es una emoción exclusiva de Jorge Martín, sino que está presente en gran cantidad de deportistas de élite. Para conocer por qué se produce y cómo puede afectar al rendimiento deportivo, en ElDesmarque hemos preguntado al psicólogo deportivo Javier Bonilla.
El profesional ha definido el miedo a perder como una emoción que se pone en marcha cuando, en este caso, el deportista siente que hay una amenaza. "Es una emoción adaptativa que tiene su utilidad, su sentido", explica.
El miedo a perder en los deportistas de élite aparece cuando perciben como amenazantes diversas situaciones, como por ejemplo, perder un campeonato que ponga su carrera profesional en juego, decepcionar a sus seguidores y a su círculo más cercano, verse juzgado por el entorno, las críticas de las redes sociales y los medios de comunicación...
Todos los deportistas pueden sentir miedo a perder en algún momento, y además, cada uno lo puede vivir de una forma diferente. "Lo más habitual es que sea un miedo adaptativo, lento y que no afecte al rendimiento", detalla el experto.
"Incluso a veces, esto puede ser algo beneficioso porque les ayuda a prepararse, perfeccionar el entrenamiento o analizar de mejor forma la competición", añade.
El problema aparece cuando esta emoción es muy intensa y afecta al rendimiento deportivo. Se puede manifestar de diversas formas:
El miedo a perder puede aparecer de igual forma en los deportes individuales y en los de equipo. Los deportistas que pertenecen a un colectivo "pueden tener miedo a no hacerlo bien y decepcionar al equipo", explica el psicólogo deportivo.
Aunque es cierto, que en los deportistas individuales el miedo a perder puede ser más intenso porque no se tiene el apoyo de un equipo . La difusión de responsabilidad queda más diluido en un ambiente grupal, pero "en el caso de un deportista individual toda la atribución de responsabilidad recae sobre uno mismo. Entonces puede ser un poco más difícil el hecho de gestionar este miedo", añade.
Especialmente, el miedo a perder depende del deportista y de su estilo cognitivo, que este le dé más o menos importancia a las variables que puedan afectarle.