Al igual que la hipertensión o la diabetes son factores que aumentan el riesgo de de desarrollar un problema vascular, el tabaquismo también lo es. Este es uno de los motivos por los que las Sociedades de Hipertensión Arterial y Riesgo Cardiovascular de España han trasladado al Ministerio de Sanidad la necesidad de abordar el tabaquismo como una enfermedad del comportamiento, teniendo en cuenta que provoca adicción por el consumo de sustancias adictivas que tiene el humo del tabaco, como es la nicotina.
Asimismo, Sanidad ha pedido que estas elaboren un documento abordando cuál es la postura de los especialistas en el ámbito del tabaquismo, así como las estrategias que entienden que hay que desarrollar.
Dicho documento se ha presentado oficialmente en el XVIII Congreso de la Sociedad Riojana de Hipertensión Arterial y Riesgo Vascular, celebrado en la localidad riojana de Ezcaray con la asistencia de un centenar de profesionales
Sus datos indican que el tabaquismo está bajando en los últimos años en España y que solo la mitad de la población española no ha tenido contacto con el tabaco.
Ha asegurado que un 22% de la población española es fumadora, un 25% es exfumadora y se aprecia una mayor prevalencia en el hábito al tabaco entre chicas jóvenes de 15 a 25 años, lo que tiene unas consecuencias importantes porque el tabaco en la mujer tiene unas connotaciones especiales, con una serie de complicaciones.
En el documento Consenso de Tabaquismo, ha dicho, se abordan las "cuantiosas" repercusiones cardiovasculares que tiene el tabaco, que es el denominador común de toda la patología cardiovascular, al estar muy relacionado con la cardiopatía isquémica, el desarrollo de ictus y las enfermedades pulmonares, por ejemplo.
Para estos especialistas, el mayor contingente del coste sociosanitario relacionado con el tabaquismo es la atención a los pacientes con cardiopatía isquémica y los que tienen enfermedades pulmonares obstructivas crónicas y oncológicas relacionados con el tabaquismo.
Las terapias no farmacológicas para la deshabituación del tabaco, como las reuniones grupales con equipos multidisciplinares, también figuran en este documento.
Además, incluye otras modalidades de consumo de tabaco que no están exentas de riesgo y patologías, como son los cigarrilos electrónicos, los vapeadores, las cachimbas e, incluso, el tabaco calentado, como ha afirmado el coordinador de estas Sociedades, José Abellán, también catedrático de Riesgo Cardiovascular en la Universidad Católica de Murcia.