La importancia de cuidar los riñones de los excesos del verano: estos son los consejos de los nefrólogos

Los excesos durante las vacaciones de verano son una realidad, motivo por el cual desde la Sociedad Española de Nefrología (SEN) han incidido en la importancia de cuidar los riñones, sobre todo teniendo en cuenta que las enfermedades renales crónicas cada vez son más habituales. De hecho, si el ritmo de nuevos casos diagnosticados sigue como hasta ahora, acabarán convirtiéndose en la segunda causa de muerte en España por detrás del Alzhéimer.

No sólo los excesos aumentan el riesgo de desarrollar una patología renal, sino que a medida que la función de los riñones disminuye, el riesgo de desarrollar una enfermedad vascular aumenta, de manera que la causa más frecuente de mortalidad en los pacientes renales son los problemas cardiovasculares, que en verano corren el riesgo de potenciarse por los malos hábitos.

“Es muy importante visibilizar las enfermedades renales, en especial la ERC (Enfermedad Renal Crónica), porque es un grave problema de salud pública en España y todo el mundo que cada día va a más. Hay que cuidar nuestros riñones en verano y siempre”, destaca el doctor Emilio Sánchez, presidente de la S.E.N. En cifras, esta enfermedad afecta a unos 7 millones de personas y conlleva que los riñones dejen de funcionar; de hecho, el número de personas en diálisis o trasplante ha aumentado más de un 30% en la última década en España.

Consejos para cuidar los riñones de los excesos

La SEN considera que durante las vacaciones de verano es un buen momento para pararse a pensar cómo mejorar la alimentación, sin olvidar el papel fundamental del ejercicio físico. De hecho, el primero de los consejos se basa en dejar en un segundo plano los ultraprocesados ya que contienen gran cantidad de aditivos, los cuales suponen una sobrecarga para los riñones e intoxican el organismo, y en su lugar consumir productos de origen natural o que no lleven estos aditivos. Por ello, los nefrólogos recomiendan el consumo de frutas y verduras combinadas en las principales comidas con pan, pastas y arroces durante el verano.

La hidratación es vital, y más aún teniendo en cuenta que en verano se pierde mucho líquido por la sudoración, el cual hay que recuperar. Por ello, los especialistas insisten en mantener este hábito especialmente ante las altas temperaturas.

Tanto el tabaco como el alcohol deben evitarse, no sólo en verano, sino siempre. Aunque esto parece una obviedad, es importante no estropear los logros del resto del año por unas vacaciones o unas fiestas argumentando que "son sólo unos días".

Alternar las proteínas del pescado blanco o azul con huevos y legumbres resulta más beneficioso que el consumo de carne a corto y largo plazo, vigilar la ingesta de sal, aliñar las ensaladas u otras comidas con aceite de oliva virgen extra -clave contra las enfermedades cardiovasculares y la diabetes-, compaginar el descanso con el ejercicio físico, andar al menos una hora al día a un ritmo ligero son otras de las recomendaciones que enumeran los nefrólogos de la SEN.

Por último, tener la meta de bajar de peso o de empezar a cuidarse es algo muy positivo, pero no todo vale. Esto significa que este objetivo se debe llevar con una dieta sana y equilibrada combinada con ejercicio físico y momentos de descanso, y no confiando en las dietas milagros y los suplementos dietéticos; motivo por el que los nefrólogos recuerdan que hay que tener cautela con estos productos y sólo se han de consumir bajo indicación de un profesional sanitario para contribuir al cuidado de los riñones en verano.