María Pombo se somete a pruebas neurofisiológicas por su esclerosis múltiple: una neuróloga detalla en qué consisten

En el año 2020, María Pombo anunciaba en sus redes sociales la esperada, pero dura noticia: "No han ido como yo esperaba siendo positiva -haciendo referencia a una serie de pruebas que se había realizado los días previos-, pero en realidad sí que me lo esperaba... Efectivamente, tengo esclerosis múltiple", enfermedad que padece la madre de la influencer.

Aunque desde entonces apenas ha hecho referencia a su enfermedad, salvo en determinadas ocasiones de forma muy sutil, esta vez sí que ha explicado a sus seguidores que a pesar de que lleva una vida que muchos desearían, no todo es un camino de rosas. Esto ha venido a raíz de una reacción de uno de sus seguidores: "Qué suerte que tengas esos ratitos. Hay gente que no sale de un hospital".

Ante este mensaje, María ha subido una historia a su cuenta de Instagram en la que aparece sentada en una silla con una especie de gorro de electrodos en la cabeza. "No te creas que no sé lo AFORTUNADA que soy [...] incluso de poder hacer con total normalidad un plan tan sencillo como hacerme las uñas. [...] Aún así, me pillas justo aquí, haciéndome unas pruebas neurofisiológicas", contaba en dicha imagen.

¿Para qué sirven las pruebas neurofisiológicas?

El nombre técnico que reciban las pruebas neurofisiológicas a las que hace referencia María Pombo son: potenciales evocados visuales, potenciales evocados auditivos y potenciales evocados sensitivos, enumera la Dra. Mar Mendibe, vicepresidenta de la Sociedad Española de Neurología (SEN) a ElDesmarque. "No son nuevas, sino que se llevan realizando desde hace muchísimo tiempo como 40 o 50 años. Son unas técnicas específicas para medir la conducción nerviosa y no son pruebas invasivas", añade.

Se trata de unas pruebas complementarias que "nos ayudan y apoyan en el diagnóstico". Aunque a priori se podría pensar que estas pruebas se utilizan para tratar o retrasar la evolución de la enfermedad, teniendo en cuenta que María Pombo ya confirmó su diagnóstico hace cuatro años, "estas pruebas solamente son para el diagnóstico, para detectar si hay una afectación de distintos nervios; luego durante el seguimiento de la enfermedad nos pueden ayudar -igual que la resonancia magnética- para ver si han aparecido nuevas lesiones, pero no son para el tratamiento", aclara la misma.

"Si una persona tiene una afectación del nervio óptico, es decir, tiene una pérdida de agudeza visual, lo que detectan los potenciales evocados visuales es si hay algún bloqueo o retraso en la conducción del nervio óptico", mientras que "si un paciente con esclerosis múltiple ha tenido otro tipo de síntomas como un vértigo, los potenciales evocados auditivos lo que miden es la conducción nerviosa en los nervios auditivos que controlan el equilibrio".

Respecto a la tercera y última de estas pruebas se utiliza si "una persona con esclerosis múltiple ha tenido síntomas que condicionan la sensibilidad (en alguna de las cuatro excepciones) lo que miden estas pruebas es si ha habido algún bloqueo nervioso en la conducción de los nervios sensitivos", explica la doctora haciendo referencia a cada una de las tres pruebas neurofisiológicas posibles.

Sobre el diagnóstico de la esclerosis múltiple

"La esclerosis múltiple es una enfermedad neuroinmunológica que puede afectar a distintas áreas del cerebro como pueden ser el nervio óptico, el cerebelo afectándonos al equilibrio, los nervios por afectación sensitiva...", explica la profesional.

En ocasiones, el diagnóstico de la esclerosis múltiple no es sencillo ya que puede confundirse con otras enfermedades. En primer lugar, los especialistas analizan los síntomas que presentan los pacientes, seguido de una resonancia magnética "en la que descartamos otras alternativas diagnósticas", el análisis del líquido cefalorraquídeo a través de una punción lumbar y las pruebas a las que se refiere la influencer.