La neumonía es la principal causa de muerte infecciosa a nivel mundial que deja 2,5 millones de víctimas cada año, de hecho, tan sólo en España provoca más de 100.000 hospitalizaciones anuales, contextualiza la Asociación Española de Vacunología.
Se trata de una infección respiratoria aguda causada por virus o bacterias, entre los que destacan la gripe, el neumococo y el coronavirus, no obstante, la vacunación puede evitar dicha afección en un gran porcentaje de los casos.
Con motivo del Día Mundial Contra la Neumonía, en ElDesmarque hemos querido concienciar sobre esta patología cuyo pronóstico depende, en gran medida, de tres factores: la edad del paciente -los mayores de 65 años y los menores de 5 son los más vulnerables-, el estado general de salud -si presenta, o no, otras enfermedades al mismo tiempo- y la severidad o gravedad en cómo se presenta la neumonía, tal y como identifica el Hospital Clínic de Barcelona.
Cabe destacar que dicho centro se refiere a la neumonía adquirida en la comunidad (NAC) al ser la "neumonía típica que se caracteriza por una presentación brusca, fiebre elevada, dolor en puntada de costado o dolor abdominal transitorio, respiración rápida (taquipnea), tos y expectoración purulenta o herrumbrosa".
Además de la exploración física, que contempla la valoración de los síntomas y auscultación del tórax con un fonendoscopio, para confirmar el diagnóstico los profesionales sanitarios recurren a otra serie de pruebas como son:
Como hemos indicado al inicio, el pronóstico de la neumonía depende de tres factores. No obstante, para contextualizar la gravedad de la misma cabe referenciar que "la tasa de mortalidad en pacientes tratados ambulatorios es inferior al 1%, mientras que en los pacientes hospitalizados la tasa de mortalidad oscila entre el 5% y el 15%, pero aumenta entre el 20% y 50% en los pacientes que requieren ingreso en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI)".
La presencia de microorganismos en la sangre, la admisión en la UCI, las enfermedades crónicas y la neumonía causada por un patógeno resistente a los antibióticos -tratamiento habitual- son factores de riesgo que se asocian con la mortalidad en dicha patología.
Al igual que ocurre con otras enfermedades, la neumonía puede agravarse y provocar ciertas complicaciones, tales como: