La contestación de Pep Guardiola en la rueda de prensa tras acabar el partido contra el Feyenoord ha causado un gran revuelo en redes y medios. Tras regalar el empate al equipo de los Países Bajos en los últimos quince minutos del partido, Pep Guardiola apareció frente a los medios con una pequeña herida en el tabique de la nariz y varios arañazos en la cabeza.
"Con los dedos, con las uñas... quiero hacerme daño", contestó el propio Guardiola al periodista que le preguntó por el aspecto demacrado de su cara. Debido al impacto mediático de su respuesta, este ha querido aclarar en su cuenta de X la verdadera intención de sus palabras y se ha disculpado porque "no pretendía en ningún caso restarle importancia al gravísimo problema de la autolesión".
Asimismo, ha aprovechado el mensaje para visibilizar la importancia de cuidar la salud mental, "sé que muchas personas luchan con problemas de salud mental todos los días, y me gustaría aprovechar este momento para destacar una de las formas en que las personas pueden buscar ayuda, llamando a la línea directa de Samaritans al 116 123 o enviando un correo electrónico a jo@samaritans.org".
La autolesión, también entendida como conducta autodestructiva, autoagresión, violencia autoinflingida... se define como cualquier comportamiento que genere un daño a uno mismo. A pesar de que existe la creencia entre la población general que el acto de autolesionarse tiene una intención suicida, la realidad no es así, sino que "más bien se trata de una forma dañina y perjudicial de tratar con las emociones", define la Sociedad Internacional de Autolesión.
De hecho, las autolesiones no solo incluyen cortarse, ni siempre son evidentes; sino que dentro de estos comportamientos también se incluye "rasguñarse, golpearse, arrancarse el pelo, hacerse hematomas, quemarse o romperse huesos".
Desde Unicef añaden otras pautas como "ejercer comportamientos adictivos, como el consumo de drogas o alcohol; no comer, comer en exceso o forzarse a vomitar; hacer ejercicio en exceso o cuando se está lesionado; involucrarse en peleas o situaciones de riesgo a propósito, incluido el comportamiento sexual de riesgo".
Las causas por las que una persona se autolesiona son muy diversas, pero la mayoría "están relacionadas con la dificultad para regular las emociones". Esto significa que "la autolesión no es un trastorno mental o una enfermedad mental", sino una conducta.
Algunos de los motivos que llevan a una persona a autolesionarse, según la sociedad, incluyen:
La neuropsicóloga clínica, Alba García, añade a ElDesmarque que otras personas a través de la autolesiones buscan aliviarse emocionalmente, de forma que al rascarse, arañarse o cortarse consiguen calmar la angustia intensa o la ansiedad que experimentan durante un tiempo determinado.