Ni con agua oxigenada ni con alcohol: así es cómo debes curar una herida
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Actualmente, el agua oxigenada y el alcohol ya no se usan
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Antes de curar una herida, hay que valorar la gravedad
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Alcohol de 70º o de 96º, ¿cuál desinfecta mejor?
¿Te han dicho o has dicho alguna vez que si una herida pica es porque está curando? Pues es un mito, asegura rotundamente Miguel Assal, divulgador de primeros auxilios y agente de emergencias SAMU, en uno de sus videos.
Y es que esta expresión se debe a que durante mucho tiempo se ha utilizado el alcohol y el agua oxigenada como antisépticos para curar las heridas, pero a día están en desuso; el matiz es que una parte de la población todavía no es conocedora de ello.
¿Por qué no utilizar alcohol o agua oxigenada para las heridas?
A pesar de que ambos compuestos son antisépticos, es decir, cuya finalidad es reducir los microorganismos patógenos, tienen una serie de efectos adversos mayores que la clorhexidina o la povidona yodada -los antisépticos más utilizados actualmente-.
Por un lado, no se recomienda el alcohol para curar heridas "porque es muy irritativo, destruye las membranas celulares, reseca la piel y favorece la formación de coágulos que permiten la colonización de las bacterias supervivientes", sino que "se recomienda su uso como antiséptico sobre piel intacta", explica José Manuel Cuervo Menéndez, miembro del Grupo de Urgencias y Emergencias de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).
Por otro lado, "el agua oxigenada también es irritativa, destruye tejido sano y además su acción es muy breve", añade el mismo.
Cómo curar una herida paso a paso
En primer lugar, antes de empezar a curar una herida es importante "valorar la gravedad" de la misma para "decidir si puede curarse en casa" o hay que acudir a un centro sanitario. El segundo punto es el lavado de manos con agua y con jabón, incluso cuando se vaya a utilizar guantes.
En caso de que la herida sangre, hay que "realizar una compresión sobre ella con una gasa seca, durante unos 5 minutos sin levantar la mano", pero, si a pesar de compresión la herida no deja de sangrar "será necesario acudir a un centro sanitario".
Cuando el sangrado cese, "lavar la lesión con suero fisiológico o agua potable" de forma que "arrastre la suciedad desde el centro a los bordes de la herida y se puede usar un jabón neutro", pero no antisépticos locales.
Después de esto, secar la herida con una gasa limpia, pero sin frotar. Es importante "no usar algodón, ya que sus pequeños filamentos suelen quedarse enganchados" y si aún así la herida sigue sucia, "puede ser necesario acudir a un centro sanitario".
Una vez terminado esto, es el momento de "aplicar un antiséptico para prevenir la infección", siempre antes habiendo comprobado que la persona no es alérgica, y por último "cubrir la herida con un apósito".
Este proceso se debe realizar cada 24 horas, y si a los siete días no ha cicatrizado o comienza a doler, a enrojecerse la piel o a supurar hay que acudir a un centro sanitario porque estos son signos de que la herida se ha infectado.
El proceso de curación de una herida
Miguel Assal detalla cuál es el proceso de curación de una herida, independientemente de la gravedad de la misma. "Tu cuerpo empieza a sanar" cuando "primero coagula y deja de sangrar", en segundo lugar "se produce la inflamación trayendo esos glóbulos blancos para combatir cualquier infección".
En tercer lugar, aparecen nuevas células cuya función es "recuperar ese tejido dañado", luego "se forma el colágeno ayudando a fortalecer el área de la herida", el oxígeno y los nutrientes la regeneran y "comienza a crecer el nuevo tejido", concluye el expertos en primeros auxilios.
