Estos son los tipos de ejercicio físico más eficientes para tratar la depresión, según la ciencia
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La intensidad del ejercicio también es un factor determinante
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Entrenamiento de fuerza para mujeres y yoga para los hombres
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Así influye la genética en el riesgo de tener depresión
En los últimos años, la salud mental ha ganado un gran protagonismo en la sociedad hasta el punto de que una gran parte de la población la considera tan importante como la salud física. De hecho, hay estudios que han descubierto que los problemas de salud mental, concretamente el trastorno depresivo, impacta de forma negativa sobre el bienestar individual más que otras enfermedades como la diabetes, el Parkinson o las enfermedades pulmonares.
"En España, el 12,74% de la población de 15 y más años presenta sintomatología depresiva de distinta gravedad: el 8,46% presenta sintomatología leve, el 2,51% moderada, el 1,19% moderadamente grave y 0,58% grave", según los últimos datos disponible de la Encuesta Europea de Salud.
El tratamiento psicológico y, dependiendo de la gravedad, la administración de fármacos son las formas habituales con las que se trata dicha enfermedad, sin embargo, diversas investigaciones han profundizado en el papel del ejercicio físico como complemento o alternativa eficaz a los tratamientos mencionados.
Qué ejercicios ayudan a combatir la depresión
Son más que conocidos los beneficios para la salud que presenta la práctica deportiva, tanto a nivel mental como físico, pero en este artículo vamos a especificar aquellos deportes que más efectividad han evidenciado de cara al tratamiento de los trastornos depresivos.
Caminar o trotar, yoga, entrenamiento de fuerza y baile son las modalidades de ejercicio más efectivas para tratar la depresión, según una investigación publicada en 'The BMJ'. Por un lado, "caminar o trotar fueron efectivos tanto para hombres como para mujeres", mientras que por otro lado, "el entrenamiento de fuerza fue más efectivo para las mujeres y el yoga o qigong fue más efectivo para los hombres". Asimismo, "el yoga fue algo más efectivo entre los adultos mayores y el entrenamiento de fuerza fue más efectivo entre las personas más jóvenes".
El estudio no solo evidenció diferencias entre los tipos de actividades, sino que también registró mayor eficacia a mayor intensidad, por lo que es mejor la actividad vigorosa.
El deporte como tratamiento para este trastorno mental
Ante tal hallazgo, este mismo estudio considera que los profesionales sanitarios deberían recomendar a los pacientes con trastornos depresivos que hagan ejercicio de intensidad vigorosa ya que este puede considerarse una alternativa o tratamiento complementario viable a la medicación y a la psicoterapia.
Aunque puede parecer una obviedad, el hecho de que los profesionales incluyan la actividad física entre sus directrices para tratar la depresión, puede orientar al paciente sobre la intensidad más efectiva, los tipos que parecen funcionar bien y que suelen ser mejor tolerados. Además, "si los determinantes sociales lo permiten, participar en ejercicios grupales o programas estructurados podría brindar apoyo y orientación para lograr mejores resultados".
Si bien la confianza en el ejercicio físico como tratamiento para la depresión no es tan fuerte como el tratamiento psicológico, "los tamaños del efecto parecen comparables, por lo que puede ser una alternativa para los pacientes que prefieren no participar en psicoterapia" y "puede actuar como un adyuvante para quienes ya toman medicamentos".
A pesar de los hallazgos, es importante matizar que son los profesionales en la materia los que conocen al paciente, así como la gravedad de su trastorno, y "deben tener en cuenta los valores, las preferencias y las limitaciones de los pacientes" de forma que "haya una toma de decisiones compartida sobre lo que mejor se adapta al paciente".
