Bea Neila tiene un currículum muy envidiable con tan solo 21 años. La piloto española es Tetracampeona de Europa y ya ha confirmado su presencia en el primer Mundial femenino de la historia organizado por Dorna y la FIM. En el canal de Twitch de ElDesmarque explicó lo complicado que es para ella poder dedicarle tiempo al deporte y a los estudios, pero con trabajo logra sacarlo todo adelante. Además, Neila tiene las cosas bien claras en el ámbito competitivo: no solo tiene ganas de conocer todos los detalles sobre la temporada, sino que tiene alguna petición.
Lo que sabemos hasta la fecha sobre el nuevo Mundial es que estará estrechamente ligado al calendario de WorldSBK, que serán seis pruebas y que las carreras serán en circuitos europeos. Para Neila, hay tres trazados que le encantaría visitar en su nueva aventura. "Me gustaría que estuviera Valencia, 100%. Ahí me siento muy bien, como en casa. Pero no es una cita que esté en el calendario de Superbike, así que no iremos. Me gustaría que estuviera Portimao o Misano, que seguro que son candidatas. También Jerez", confiesa la madrileña.
Por otro lado, Neila cuenta el por qué de su dorsal #36, que no tiene nada que ver con el bicampeón del mundo Joan Mir. "Mi primera carrera la hice con ocho años, y justo mis padres tenían 36 años. Entonces decía 'ah, Beatriz, 36'. Me quedé pensando en que la 'Z' hace la simulación del '3', así que les decidí el '36' por mis padres, para dedicarles la primera carrera", cuenta Neila.
Mientras que Neila iba haciendo historia, el radar de Valentino Rossi se activó. La joven piloto cuenta cómo conoció al expiloto de MotoGP y cómo es su relación actualmente con él. "En 2019 competía en el Mundial de Superbike 300, siendo piloto oficial de Yamaha. Valentino Rossi hizo una Mastercam de pilotos y yo era la única española representando a Yamaha. Viví una semana con él y con los demás pilotos alucinante en Tavullia", empieza la española.
"Esa mismo semana, me caí y me hice daño en la rodilla. Me llevó a su fisio para tratarme la rodilla y así disfrutar la semana de campus. Él se comunicaba en español y creo que nos caímos muy bien. Además, en diciembre de ese año me invitó a las 100 millas en su Rancho y me dio la oportunidad de pasar un buen fin de semana. Desde entonces siempre me ha ido llamando, así que cada diciembre voy a su casa", zanja la piloto española.