La Reina Letizia o la fiesta (prohibida) que lía la de Dios en Madrid
El próximo 2 de noviembre se puede liar muy fuerte en Madrid. De hecho, pase lo que pase, el lío está asegurado. Y es que no es otra que la reina emérita Sofía la que ese día cumple años.
Y no precisamente una fecha cualquiera, sino 80. Cómo no, con toda su buena fe del mundo, Sofía tiene en mente celebrar una fiesta que reúna a toda la familia. Ahí es donde empieza el follón.
La última reunión
Lo más parecido a algo así ocurrió el pasado mes de enero cuando se celebró el cumpleaños de su marido. Juan Carlos I quería celebrarlo a su estilo, a lo grande, pero el Rey Felipe le cortó las alas.
Finalmente lo que tenía que ser una gran fiesta acabó con una comida familiar en la que estuvieron presentes los reyes vigentes, los eméritos, la infanta Elena y los nietos. Ni rastro de los Urdangarín.
La fiesta de la reina Sofía
Bien, Sofía busca algo parecido, pero con toda la familia junta, que no falte nadie. Es por eso que, según varios medios, habría invitado a su hija Cristina y a su familia al evento.
La reina emérita es muy consciente de las diversas situaciones tensas que están resquebrajando a la familia y pretende, a través de esta celebración, que las aguas vuelvan a sus cauces.
Parece más que difícil. La Reina Letizia ya le ha hecho saber por activa y por pasiva a su marido que no quiere saber nada de los Urdangarín, Elena ni de sus suegros. Cuanto más lejos, mejor.
Qué decir de sus hijas que, como se pudo comprobar en el polémico encuentro en la catedral de Palma, no es que le tengan especial aprecio a su abuela.
Por su parte, Felipe VI no es que tenga muchs ganas de celebrar nada con su hermana Cristina ni con su padre, que no han hecho otra cosa que ponerle en dificultades en los últimos tiempos. Veremos finalmente quien acude y quien no. Eso sí, resulta difícil pensar que, como desearía la reina Sofía, lo hagan todos y reine la paz.