Marc Márquez y Gemma Pinto cada vez se esconden menos en redes. Desde que se confirmara su relación son muchas las vivencias que ponen en sus perfiles para compartirlas con sus seguidores.
En una de las últimas publicaciones el siete veces campeón del mundo compartía en sus stories cómo su novia se ponía el casco de Álex Márquez y le hacía una pequeña broma. "Tu cuñada pide royalties", decía entre risas. No es la primera ya que entre ellos también hay una gran sintonía.
El español Marc Márquez (Gresini Racing) volvió a sonreír encima de una motocicleta en su estreno con Ducati, tras cuatro años seguidos en Honda en los que el de Cervera (Lleida) perdió el ‘feeling’ con la moto, lo que le llevó a caerse en repetidas ocasiones y a lesionarse múltiples partes del cuerpo, mientras intentaba reencontrarse con la victoria en MotoGP, un objetivo que sí había logrado en seis ocasiones entre 2013 y 2019.
A pesar de no marcar el mejor tiempo, el catalán fue el gran protagonista de la jornada en los entrenamientos de la categoría reina en el circuito Ricardo Tormo, en Cheste (Valencia, dos días después del Gran Premio de la Comunitat Valenciana que puso fin a la temporada 2023).
Era una decisión difícil la de Márquez, que desde que llegó a MotoGP pilotó para Honda, pero al menos la primera sensación es que el de Cervera disfrutó sobre una motocicleta como lo había hecho en tantas ocasiones entre 2010 y 2019, lo que le sirvió en su día para ganar un título de Moto3, otro de Moto2 y hasta seis campeonatos mundiales de MotoGP en apenas siete años.
Fractura de húmero en una caída, afectación en un ojo tras otra, lesiones en el metacarpiano de su mano derecha, en la costilla… Márquez se jugó el tipo durante estas últimas campañas con el objetivo de volver a ser el que siempre había sido.