Jude Bellingham se ha convertido en el gran ídolo del Real Madrid. Sus números, su manera de jugar, su forma de actuar con la gente y su celebración icónica le han convertido en un emblema del equipo blanco. Pero parece que el inglés todavía no lo tiene tan integrado.
El ex del Dortmund es un tipo normal. Y así quiere seguir siendo, pese a su éxito. Tanto que incluso aprovechando la visita de su madre a la capital de España, Bellingham quiso enseñarle el centro de Madrid con un paseo con su madre por las calles de Gran Vía.
Aunque iba con gorro de invierno, la gente no tardó en darse cuenta. En pocos minutos, las calles de la capital se habían llenado de jóvenes y no tan jóvenes que querían hacerse una foto con Jude. En el vídeo, que se ha hecho viral en redes sociales, se puede ver a Bellingham esperando con su madre en un semáforo, mientras centenar de hinchas le piden fotos.
Demostrando su manera de ser y con su madre ajena a lo que estaba ocurriendo, Bellingham no dudó en hacerse fotos con todos los presentes poniéndoles además una sonrisa a cada uno. Un tipo extraordinario que se comporta como alguien normal.
Jude Bellingham recibió de todos los colores ante el Villarreal. Esto provocó que el inglés nos dejará su imagen más amarga, calentándose con el árbitro y provocando a la afición para que pitara. Incluso el colegiado se vio en la obligación de avisarle de una posible roja.
Esto provocó que Carlo Ancelotti, preocupado por el estado de salud de su jugador, acabara decidiéndole cambiarle. “Bellingham ha sido protagonista del partido jugando muy bien y luchando siempre. Le quité del campo para evitar problemas. Cuando yo puedo evitar problemas, lo hago. Bellingham tuvo un problema del hombro y cuando puedo le voy a quitar”, explicó en rueda de prensa.