Luka Doncic y su truco para lidiar con la presión de la NBA: “No le gusta el basket”

Luka Doncic es una de las figuras más relevantes de la NBA. El exjugador del Real Madrid bate récord tras récord con los Dallas Mavericks y, desde hace ya varios años, deja sombrado al público con cada una de sus estelares apariciones.

Cuanto el esloveno aterrizó en Estados Unidos sorprendió la manera en que era capaz de manejar toda la presión que se cernía sobre él. Pero ahora, en una entrevista con Rachel Nichols, ha desvelado la clave para hacerlo. No es otro que la ayuda de su prometida, la modelo Anamaria Goltes.

La influencer, natural de Eslovenia, no es, para nada, una aficionada al baloncesto y esa es una de las claves de Luka: la desconexión total cuando sale de las pistas. “Hay mucha presión afuera. Cuando llego a casa, no se habla de basket. A Anamaria no le gusta, pero va a todos los partidos”. Y es cierto. A pesar de que ese deporte no sea del agrado de la pareja de Doncic, acude a prácticamente todos los partidos que los Mavericks juegan como locales e incluso se desplaza a los que puede con el equipo.

Inevitablemente, Anamaria va ‘cogiendo cariño’ al baloncesto por la evidente presencia que tiene en su día a día. “A ella le gusta ahora, pero no le gustaba antes, lo cual es bueno para mí. Realmente me gusta eso”, reconocía Luka.

Desde los 11 años: la historia de amor de Luka Doncic

El jugador europeo detalló cuándo y dónde conoció a la que ahora es su apoyo vital en Estados Unidos. “La conocí en Croacia en un campamento, cuando teníamos 11 años. Estoy muy feliz de tenerla”, explicaba Doncic.

A pesar de que en la entrevista reconoció no ser muy romántico, es conocido que le pidió matrimonio a Anamaria el pasado mes de julio, cerca del castillo Bled, en Eslovenia. Hace apenas dos semanas han tenido su primera hija juntos, la pequeña Gabriela.