Max Norman ha sido condenado a cuatro años y medio de cárcel después de que las autoridades policiales hallasen en su domicilio más de 60.000 libras en drogas y más de 80 dosis de crack ocultas en su ropa interior.
Norman sufre un trastorno de déficit de atención con hiperactividad (TADH) y ya había sido arrestado anteriormente por poseer cocaína y heroína. Su implicación se destapó tras una redada de la Policía de Merseyside, cuando encontraron en su casa grandes cantidades de sustancias estupefacientes y los móviles que utilizaba para la venta de la mercancía. En el juicio, en esa ocasión, admitió “estar involucrado en el suministro de cannabis”.
Tras otras varias condenas, la última implica el ingreso en prisión de Max Norman por cuatro años y medio. “Fuiste extremadamente tonto al continuar después de tu primer arresto... y después de tu segundo arresto. Eso empeora mucho tu situación”, le dijo el juez a Max en el juicio al que se sometió en 2021.
El ‘Daily Mail’ publica la trayectoria de Max Norman, que se formó en las canteras de Manchester City y Wigan Athletic. Dio el salto al fútbol profesional con Tranmere Rovers y Morecambe. A la experiencia en el fútbol de alto nivel británico hay que sumarle la experiencia en Turquía, donde jugó durante ocho meses en el Alanyaspor.
Su cuenta de LinkedIn revela, además, que jugó en el Club Deportivo El Ejido de Almería. Stuart McNally, el abogado que representó al futbolista en su último juicio, explicó definió a Norman como “un futbolista con mucho talento que jugó a un alto nivel tanto en el Reino Unido como en Europa”, pero que finalmente ha acabado envuelto en problemas judiciales por consumo de drogas y narcotráfico.