Dani Alves y el resto de las partes estaban citados en la Audiencia de Barcelona. El brasileño ya conoce la sentencia de la acusación que pesaba sobre él de un delito de agresión sexual. Cuatro años y medio de prisión han sido los que se le ha impuesto al futbolista.
La justicia le ha impuesto esos años de prisión, además de 5 años de libertad vigilada, alejamiento e incomunicación de la víctima durante 9 años y seis meses y una indemnización de 150.000 euros y el pago de las costas del juicio. Es este atenuante de reparación del daño el que ha hecho que su condena haya sido inferior.
A principios del mes de febrero, el jugador se enfrentó a tres sesiones de juicio en donde los testimonios, pruebas periciales y el relato de la víctima han sido cruciales para que el juez haya decidido el futuro de Alves. También al final de esas sesiones, Inés Guardiola pidió la libertad provisional para su defendido, algo que estaba pendiente de resolver y que conoció al mismo tiempo que la sentencia, de nuevo ha sido denegada por el alto riesgo de fuga.
Los hechos por los que ha sido sentenciados se remontan al 30 de diciembre de 2022 en la discoteca Sutton. Dani Alves conoce a la denunciante. Tras eso pasan a un baño en donde ocurre la violación de la que ha sido culpado.
Una de las claves de este caso ha sido el relato de la joven que se ha mantenido en el tiempo, sin contradicciones y con coherencia con respecto a las pruebas periciales.
Sin embargo, Dani Alves presentó varias diferentes. Comenzó diciendo que no la conocía para acabar admitiendo que sí hubo sexo entre ellos, aunque de forma consentida. La estrategia que llevó su defensa en el juicio fue la de acogerse al atenuante del alcohol.
En su última declaración aseguró que iba muy bebido y que no se acordaba de los hechos. Un perito que él contrató de cara al juicio, aseguró que el brasileño había bebido, pero que sabía distinguir el bien del mal y que era consciente de sus actos.
Todo esto ha sido crucial para que la justicia haya determinado esa decisión. Recordemos que antes de conocer la sentencia, la Fiscalía pedía nueve años de cárcel para él, 12 la defensa de la víctima y la absolución por parte de Inés Guardiola, abogada de Dani Alves.