El exclusivo reloj de Pep Guardiola para visitar al Real Madrid: más de 1,3 millones de euros

Pep Guardiola visitó una vez más el Santiago Bernabéu, un campo que conoce muy bien. Y para ello lo hizo con un accesorio de lo más exclusivo. El técnico catalán portó un reloj de más de 1,3 millones de euros, con un diseño exclusivo de Rafael Nadal.

El entrenador del Manchester City escogió un reloj de récord en su visita a Madrid en la ida de los cuartos de final de la Champions League. Y es que el Richard Mille 27-01, modelo que la marca suiza creó para homenajear al tenista español, es el reloj más ligero de todo el mercado, con tan solo 18,83 gramos de peso. En el año 2013, con su lanzamiento, lograron batir la marca de ligereza y hacer historia entre la industria relojera.

Richard Mille solo fabricó 50 unidades de ese preciado accesorio que, desde luego, no está hecho para todos los bolsillos. Su diseño, tan estético como sofisticado, está labrado a base de cables tensores montados con sumo detalle y cuya tensión debe ser extremadamente precisa, ni muy fuerte ni insuficiente.

El precio de partida del Richard Mille 27-01 fue de 800.000 euros, pero con el tiempo se ha revalorizado hasta, prácticamente, duplicar su valor.

No es el único Richard Mille que Guardiola atesora. El pasado mes de agosto, entre otras ocasiones, ya ha lucido varios relojes de ese calibre. En la victoria ante el Burnley, el ex del Barça lució un Richard Mille 67-02, de cerca de 300.000 euros.

Pep Guardiola y sus ‘problemas’ en el Santiago Bernabéu

No fue una experiencia tranquila esta última la de Guardiola en el estadio del Real Madrid. El entrenador del Manchester City expresó en las comparecencias posteriores al choque sus quejas por el estado del césped del feudo madridista.

"La verdad que el estadio ha quedado impresionante. Ahora sólo tienen que cuidar la hierba, sólo tienen que mejorar eso. Florentino se tiene que preocupar del próximo paso hacia un buen campo, que como siempre el Madrid siempre lo había tenido", declaraba el de Santpedor.

Al margen de ello, pues el césped estuvo en las mismas condiciones para ambos equipos, el encuentro fue un quebradero de cabeza para los entrenadores. Y es que el partido fue muy atractivo para el espectador, pero en las áreas técnicas seguro que hubieran preferido que hubiese más control en el juego.

Pep Guardiola no pudo contar con uno de sus principales baluartes en su visita al equipo de Carlo Ancelotti. Kevin de Bruyne, que apuntaba a ser titular, tuvo que comunicar poco antes del inicio del choque a su entrenador que no estaba en condiciones de disputar ni un solo minuto de la ida de los cuartos de final a cuenta de una gastroenteritis.