Ana Peleteiro está a poco más de un mes y medio de disputar los Juegos Olímpicos de París 2024. Pero antes, esta misma semana, tiene una cita deportiva en Roma. La de Ribeira participará en el Europeo de Atletismo en la capital italiana a partir del 7 de junio. Por ello, hoy se ha despedido de su hija Lúa, que se ha marchado con sus padres para que Ana pueda prepararse y estar al 100% sobre la pista.
Lúa llegó a la vida de Ana Peleteiro y Benjamin Compaoré en diciembre de 2022 y desde entonces sus vidas dieron un completo vuelco. Como es obvio, los dos deportistas tuvieron que volcarse con el nacimiento de su hija, lo cual afectaba a sus carreras profesionales.
Apenas seis meses después, Peleteiro ya estaba de nuevo sobre la pista y poco a poco ha ido optimizando su forma hasta ahora llegar como una de las favoritas a los grandes compromisos que tiene por delante.
Desde que diese a luz a Lúa, Ana no se ha separado de ella, pero de cara a los Juegos Olímpicos, el plan iba a ser otro. “A mi hija voy a dejarla con mis padres cuando empiecen los Juegos y la recogeré después de la final, que si Dios quiere estaré”, confesaba en una entrevista.
Y eso mismo ha hecho para la competición en la que debutará el próximo viernes a las 11:10 de la mañana. La gallega participará desde el 7 de junio en el Europeo de Atletismo que se celebra en Roma, hacia donde viajará mañana lunes. Y en sus redes sociales ha confesado la extraña sensación que tiene ahora que se ha separado de su hija.
Peleteiro está viviendo un domingo muy tranquilo y normal, pero que desde que la familia aumentó era inimaginable. Relajada, después de ver a Carlos Alcaraz ganar en Roland Garros y tener tiempo para disfrutar después de la Diamond League Athletics, ha compartido en sus redes su pensamiento.
“Esta mañana se fueron mis padres y se llevaron a Lúa con ellos a Galicia, porque mañana me voy al Europeo”, arrancaba enunciando.
“Estoy triste, pero a la vez me siento rarísima porque estoy en el sofá sin absolutamente nada que hacer y tengo todo el rato la sensación de que en cualquier momento tendré que ir a recogerla a la cuna porque se ha despertado de la siesta, y por supuesto es algo que no va a suceder”, confesaba la deportista en sus stories de Instagram.
“Es increíble, pero estoy tan acostumbrada a ser mamá, que volver a tener tiempo para mi sola, se me hace raro, incluso incómodo por momentos. Parece que le falta un brazo. ¿Os pasó lo mismo a los demás que tengáis niños, o se me está yendo la olla?”, preguntaba Ana a sus followers madres.
Bromeando acerca del tema, Ana subía después un vídeo con su perro. Sobre las imágenes escribía: “Alguien está feliz porque vuelve a ser hijo único por unos días”.