Sergio Ramos y su reencuentro con Maluma en el concierto de Sevilla: Pilar Rubio, la gran ausente

Maluma aterrizó en la ciudad de Sevilla para deleitar a miles de fans con sus canciones. El cantante conoce bien esta ciudad ya que la ha visitado otras veces de la mano de Sergio Ramos, con el que comparte una gran amistad. El colombiano ha estado en su finca viendo su yeguada ya que es un gran amante de los caballos con el jugador y le compró un ejemplar.

Ha sido el futbolista el que ha compartido en sus redes sociales el encuentro que tuvo con Maluma tras el concierto. No estuvo solo. Sergio fue acompañado de su madre y de su hermana. ¡Cómo disfrutamos ayer del concierto de Maluma! Siempre un espectáculo, mi brother”, decía Ramos en su publicación.

Pilar Rubio, la gran ausente

La que no aparece en las fotos y parece que no estuvo fue Pilar Rubio. La presentadora no acompañó a su marido al concierto. Un hecho que sorprendía a algunos ya que apenas se les ha visto junto en lo que va de verano.

La única publicación reciente de los dos es cuando cumplieron cinco años de casados y pusieron un mensaje en redes. “Celebrando 5 años de casados… ¡Qué suerte compartir la vida! Por seguir celebrando, sonriendo, y disfrutando de nosotros y los nuestros. Feliz aniversario, cariño. ¡Te quiero!”, decía el central.

Más allá de esto no se les ha visto compartir planes ni vacaciones de verano, al menos en redes. El central viajó hasta Estados Unidos con su hijo mayor para ver un partido de la NBA, pero ahí tampoco estaba Pilar Rubio.

Sergio Ramos, de los pocos contentos con el concierto de Maluma

Sergio Ramos acabó contento con el concierto, pero no todos los asistentes pesaban lo mismo. El evento se celebró en la Plaza de España de Sevilla y duró poco más de una hora. Un hecho que ha producido la decepción de algunos de sus fans ya que algunos de ellos han pagado más de 130 euros por verle.

Esta actuación estaba dentro de un festival, Icónica Santalucía Fest. En las redes sociales se han producido numerosos comentarios quejándose del evento. “Concierto más corto que las vacaciones de un preso”, “Más corto que un fandango” y “Un poco decepcionada… para una hora tanto dinero…”, “Decepcionante. 1 hora y 10 minutos de concierto. De las cuales se ha cambiado cuatro veces, muchas paradas, bajada al público, y la mitad de las canciones la ha cantado el público”, decían algunos de ellos.