Ibai Llanos comenzó el 26 de junio su cambio físico tras hacer una promesa en la Kings League. Desde entonces, el streamer se ha puesto serio y está documentando todos los días su cambio en sus redes sociales. De momento, el progreso es más que positivo habiendo perdido aproximadamente 20 kilos desde que comenzó. Sus avances son realmente notables hasta ahora.
Se cumple ya el día 39 del entrenamiento su cambio no solo ha ha sido físico, sino también en su mentalidad y perspectiva. Tras llevar una vida sedentaria y enfrentarse a repetidos intentos fallidos de adelgazar, el bilbaíno parece haber comprendido la importancia de la disciplina y, sobre todo, la necesidad de dedicar tiempo cada día al autocuidado. Este vídeo es muy especial porque cuenta ya que cuenta con una visita de lo más inesperada: Ilia Topuria. Una visita del streamer sigue a la del futbolista Sergio Ramos en el gimnasio del luchador.
Durante el calentamiento, Topuria e Ibai comparten comentarios divertidos, especialmente cuando el creador de contenido hace reír a Ilia con sus bromas. Antes de comenzar el entrenamiento Llanos ya sabe a lo que va. "El matador me va a matar", asegura sin saber la que se le venía encima.
Mientras tanto, para hacer la sesión más amena comienza con sus bromas. "Al sparring que venga aquí le has arruinado todo el jueves", dice. El streamer vasco se encontró con el exigente entrenamiento que el hispano-georgiano había preparado para él.
Este consistió en un circuito de alta intensidad con ejercicios de levantamiento que hicieron a Ibai sufrir y sudar intensamente, obligándolo a dar lo mejor de sí mismo. Mientras tanto, el campeón del peso pluma lanza una de sus frases habituales tanto dentro como fuera del octágono: "Esto va para los fans de Ibai, sí se puede... por supuesto que sí, ¿quién dice que no?".
Para finalizar la jornada, el peleador acompañó al streamer en una serie de abdominales y una plancha de 30 segundos. Un circuito que acabó con el "no puedo más, tío, esta es la casa del miedo" de Ibai. Eso sí, "todo su esfuerzo tiene su recompensa". Ibai fue recompensado con una ola de aplausos de todos los presentes, incluyendo al propio Ilia Topuria.