Georgina Rodríguez ha dejado grandes momentos en esta temporada temporada de 'Soy Georgina' en Netflix. La influencer comparte su día a día en donde sus hijos son el motor junto a Cristiano Ronaldo.
En uno de los capítulos, la de Jaca se va a un centro comercial con amigos y sus hijos. Parque de bolas, juegos para niños, pasaje del terror y muchas otras actividades son las que pudieron disfrutar.
Después de ahí fueron al museo de Cristiano Ronaldo en Riad y ahí pudieron hacer otra actividad. Lanzar penaltis. Georgina Rodríguez se puso delante de la portería y entonces comprobó por ella misma algo que el portugués lleva haciendo años y años en un terreno de juego.
"Los penaltis son súper difíciles de tirar. Yo no entiendo como Cristiano mete todos los que tira", reflexionaba la influencer. También pudieron comprobar por ellos mismos el gran salto que tiene el delantero del Al Nassr.
Una de sus mayores virtudes es el salto que tiene y en una máquina estaba la medida a la que saltaba. La gente que visita el museo puede comprobar su salto y la gran diferencia que hay con la suya. Georgina y los niños lo pudieron hacer.
La familia siguió disfrutando de los trofeos y los logros del portugués en el trofeo y los niños alucinaban con todo lo que había conseguido su padre.
En la tercera temporada no solo se ven sueños cumplidos de Georgina como desfilar por primera vez en una pasarela, sino también lo de sus hijos. La influencer vive por y para ellos como ella misma reconoce.
En uno de los capítulos, Georgina conoció a Bad Gyal en un acto y a través de ella sus hijos pudieron conocer a la cantante, de la que son unos fans. La inocencia de los niños salió a relucir y Mateo no tuvo filtros a la hora de decir lo que le pareció la primera impresión.
Georgina hizo videollamada con ellos y la pudieron ver a través de una pantalla. "Yo la he visto y era diferente", dijo el pequeño despertando la risa de la cantante.