El culturista Joan Pradells es uno de los tantos afectados por la DANA que ha arrasado decenas de municipios valencianos. Aunque no ha tenido que lamentar pérdidas humanas, sí bastantes materiales, especialmente su gimnasio que fue una de las zonas de su casa más dañadas.
Han sido días de mucho trabajo centrados en limpiar todas y cada una de las máquinas que habían quedados cubiertas de barro, pero esta situación no le ha hecho olvidarse de su objetivo como culturista ya que ha mantenido, en la medida de lo posible, su estricta dieta y sus exigentes entrenamientos.
En uno de sus últimos vídeos ha detallado en qué consiste su última dieta, cuántas comidas hace y qué come en cada una de ellas. Esta es su última dieta de ganancia de volumen antes de comenzar con la definición, basada en la ingesta de más de 5.000 calorías; 700 calorías más que en la dieta que realizó a finales de marzo principios de abril.
A diferencia de lo que le costó esta última -admitió que estaba muy saturado de comida-, parece que la actual dieta de más de 5.000 calorías la está llevando bastante mejor o esas son las sensaciones que se perciben en el vídeo.
Nada más levantarse se sumerge durante unos minutos en la piscina de agua fría, "prometo que esto os despierta de una", que está a unos 15ºC aproximadamente. Después continua con el cardio en cinta, los abdominales y los hipopresivos.
Unos veinte minutos antes de la primera comida del día se bebe un batido verde, que él llama 'greens', para su salud digestiva. Finalmente, a las 08:31 se toma primero la suplementación y el desayuno que incluye: 100 gramos de arroz, 200 gramos de ternera y dos huevos. Él mismo asegura que "está bastante rico, le he puesto sal -concretamente un gramo de sal rosa-".
Mientras se toma el desayuno, explica a sus seguidores que, aunque se trata de su última dieta de volumen, apenas ha ganado peso, pero es que ya pesa 130 kilos y mantenerlos no es fácil.
Tras una reunión, Joan Pradells saca del frigorífico su segunda comida, la cual ya había preparado previamente. Se trata de un combo anabólico y 20 gramos de crema de almendras.
Este asegura que su segunda comida es su favorita, aunque también añade que en esta dieta le gusta casi todas.
Tras subir de entrenar en el gimnasio que, "aunque no lo parezca hay mucha suciedad aún", se toma el post-entreno formado por: 120 gramos de crema de arroz y 60 gramos de proteína isolada -matiza en este último detalle- que mezcla con agua fría porque asegura que con eso mejora mucho el sabor, y por último se toma un plátano.
Poco tiempo después consume la cuarta comida que consiste en una mezcla de salsa de soja, 120 gramos de arroz y 250 gramos de pollo, al mismo tiempo que explica que "dejo mucho tiempo desde la ultima comida hasta el entrenamiento porque me gusta sentirme ligero al entrenar y hacer la digestión bien".
En la quinta cena vuelve a consumir 120 gramos de arroz y los 250 gramos de proteínas, esta vez, los cambia por salmón. Al igual que en la cuarta comida, mezcla ambos alimentos con salsa de soja.
Finalmente a las 21:00 llega a la última comida: 100 gramos de arroz, 60 gramos de proteínas, 20 gramos de crema de almendras, "muy importante de almendras porque es antinflamatoria", y 150 gramos de arándonos, "esto es para mi como chuches que ayudan a la inflamación y a la siguiente semana me los quitan".