Los aurinegros tienen una desventaja de cinco puntos con respecto al Melilla, ahora cuarto clasificado. El equipo lepero, eso sí, tiene dos partidos menos contabilizados y a esta circunstancia se agarra en la competición. El primer objetivo de Tevenet, no obstante, es que sus jugadores recuperen el nivel de antes. El técnico sevillano está descontento con la actuación de sus hombres en la jornada anterior. En este sentido, se esperan cambios en la alineación. Rojas y Lobato, bajas en Lucena, y Urko Arroyo, que lleva meses en la enfermería, tienen posibilidades de reaparecer.
Rubén Bover y Antelo, por su parte, arrastran molestias y son bajas junto a Vicente Moscardó, desde enero lesionado. Tevenet hará recuentos de efectivos el mismo miércoles antes de decidir la alineación frente al Écija.
El equipo astigitano tiene la moral por las nubes después de poner fin el pasado fin de semana a una racha de 13 partidos sin ganar en la Liga. La víctima fue el Lorca, al que venció en San Pablo por la mínima.