El Xerez da un gran paso (3-1) hacia la salvación

Paso casi definitivo para la salvación del Xerez. Los de Vicente Moreno han conseguido la segunda victoria consecutiva en casa ante el Recreativo de Huelva. Los azulinos, tras irse mandando al descanso con un contundente 3-0, perdieron control en la segunda, aunque no temieron por el resultado.
El Recreativo fue el que empezó algo más animoso. Manolo Martínez lanzó por encima de Doblas en el minuto 12. Sería el único susto de un Decano que perdió terreno y posición. El Xerez empezó a controlar y a superar claramente a un adversario que se fue del campo. Un lanzamiento de Cordero desde fuera del área, que detuvo Manu Fernández en dos tiempos, fue la antesala del primer tanto azulino.
José Vega, que volvía tiempo después al once inicial, estrenaba un marcador que dos minutos después recibía otro tanto del Xerez. En esta ocasión Raúl Cámara, que regresaba a la formación titular tras su lesión. El ex del Recreativo de Huelva se la picó desde fuera del área al meta recreativista en un gol de muy bella factura.
Con el Recreativo totalmente desaparecido, la afición se divertía como pocas veces este año. El conjunto de Vicente Moreno tenía todo el poder y a dos minutos para el final de la primera mitad ampliaba más su distancia con un remate a placer de Tato tras recibir de Maldonado.
Nada más comenzar la segunda, el Xerez pudo haber asestado el cuarto golpe en un lanzamiento de Maldonado. El Recreativo también lo intentó con un disparo de Jesús Álamo. En el minuto 48, Doblsa tuvo que despejar una ocasión del conjunto onubense, que recortó distancias por mediación de Sergi Enrich. El recreativista empezó a tener más protagonismo en el campo, y el Xerez cedió mucho terreno. El Decano tuvo algunas ocasiones de peligro ante Doblas, aunque el equipo de Moreno no temió en exceso por el resultado. 
Los azulinos pidieron un penalti por manos en el minuto 64, mientras que el colegiado anuló un tanto de Vélez ochos minutos más tarde. Una vez que el Recreativo perdió empuje al ver que le era imposible conseguir un resultado positivo, el partido acabó.