El camerunés, que ha sido de los más destcados desde su llegada al filial xerecista por el número de goles que ha marcado, maneja dos ofertas del fútbol francés y otra de un club español, pero por el momento le da la prioridad al Xerez porque está muy a gusto en la ciudad.
La situación institucional del club provoca que jugadores como él pueda terminar cambiando de aires, ya que de momento nadie se quiere responsabilizar en la toma de decisiones.