Cabe recordar que la fecha de hoy no sólo era importante por el cara a cara entre ambas sociedades que luchan por el club, también para conocer si alguno de los acreedores no asistentes a la firma del convenio interponía alguna objeción. El acreedor que tomara esa decisión, que tendría que ser uno de los que no firmó el pasado lunes el convenio o que no asistiera al acto, tendría que correr con las costas, que ascenderían a la totalidad de los créditos ordinarios. Por lo tanto, es una cantidad elevadísima y, según ha podido saber Eldesmarquejerez, tendría que ser un acreedor que se declarara insolvente.
Por ahora parece que no se va a dar ese extremo y el convenio de acreedores seguirá su curso pese a los rumores insistentes que subrayaban que los administradores seguirían un tiempo más al frente de la gestión al impugnarse en el plazo propuesto. Habrá que esperar al fallo de la jueza, que será a lo largo de la semana, para confirmar todos estos extremos.