Morales sigue en sus trece y sabe que la dificultad por la que está pasando el club es extrema. En esa tesitura, el nazareno mantuvo en la jornada de ayer una reunión con la plantilla para buscar soluciones financieras urgentes. Una vez que parece que el embargo de Seguridad Social se instala como algo normal, Morales ha sentado a la plantilla y le ha hecho ver que o hay rebajas o peligra seriamente la viabilidad del club. Argumento también utilizado en los últimos encuentros por López Ballesteros con escasa trascendencia. El máximo accionista se ha hecho con las riendas de la situación y ahora ha pedido una rebaja del 20 por ciento a su plantilla. Toda la plantilla, salvo los recién llegados y Maldonado.
Con todo ello, la situación está planteada y ahora son los propios jugadores los que tendrán que valorar esta propuesta, para empezar a negociar el próximo lunes de manera individual. Además, esta medida implicaría que no hubiera bajas, tal y como ha pedido el cuerpo técnico. En principio, la plantilla está sumida en un mar de dudas y existen posturas encontradas a este respecto.