Tres juveniles matan a un juez de línea en Holanda
Los hechos ocurrieron el pasado sábado en Almere, localidad cercana a Ámsterdam, en un encuentro entre el equipo local juvenil, Buitenboys, y sus rivales de la capital, Nieuw Sloten. La víctima, Richard Nieuwenhuizen, un árbitro aficionado de 41 años, recibió una tremenda paliza tras un partido violento que terminó en empate 2-2.
Según informa El País, los tres arrestados eran jugadores de Nieuw Sloten. Nieuwenhuizen acudió al hospital tras sufrir golpes en la cabeza y el estómago. Ante la gravedad de las heridas, los médicos indujeron un estado de coma del que ya no despertó. Por si fuera poco, la situación fue más trágica aún para su hijo Mykel, que jugaba ese día con los Buitenboys, y lo presenció todo.
La muerte ha conmocionado a la afición holandesa dada la juventud de los presuntos agresores. Se da la circunstancia, además, de que la Federación Nacional de Fútbol (KNVB) acaba de suavizar las sanciones para los jugadores aficionados y menores de edad. Según la nueva norma, solo pueden ser suspendidos durante tres años.
En un comunicado oficial, la junta directiva ha calificado de "locura que alguien sufra un asalto de esta clase cuando disfruta de su afición favorita". Además el Nieuw Sloten, ha decidido echar echar del club a los detenidos.
Por su parte, Frank de Boer, entrenador del Ajax y reconocido exfutbolista holandés, ha pedido que se tomen cartas en el asunto, "porque esto es incomprensible", "¿dónde está la formación que estos chicos debieron haber recibido?", ha dicho.
Mientras la policía continúa sus investigaciones, la ministra de Deporte, Edith Schippers, ha condenado unos hechos "horrendos". El equipo de los agresores ya había sido advertido antes por su mal comportamiento, en especial de los insultos contra otro juez de línea, en un encuentro anterior. Los Buitenboys ocupan la cuarta posición en la liga juvenil holandesa. Nieuw Sloten, por el contrario, está en octavo lugar.