Había muchas esperanzas depositadas en el partido de esta tarde, mucha ilusión de una afición que quería creer en la remontada de un equipo que sigue naufragando por la Segunda División. Carlos Ríos no está siendo capaz de cambiar la dinámica negativa y derrotista de una plantilla que está demostrando sus grandes carencias partido tras partido.
Otra tarde más se ha repetido la historia de casi siempre. Buenas intenciones al principio para nada. Nadar para no llegar a la orilla, para no aprovechar las ocasiones y adelantarse en una primera en la que tal vez mereció más el Xerez, pero sin gol es imposible.
Maldonado, al filo del descanso, protagonizó la oportunidad más clara para el cuadro xerecista. Un lanzamiento que tuvo como respuesta una gran parada del meta Javi Jiménez. Lucas Porcar, de falta, también probó suerte en el ecuador de la primera pero su disparo salió rozando la portería del portero del Murcia.
En la segunda, el Xerez fue perdiendo el sitio. El Murcia se hizo con el control de la situación. Los pimentoneros no habían llegado mucho al marco de Navas -una ocasión de Nafti y otra de Matilla en los últimos instantes del primer acto- pero la entrada de Saúl dio un nuevo aire al ataque local. Y cada acercamiento se convirtió en gol del Murcia. Tal vez fue un excesivo castigo.
La reacción del Xerez no llegó y en los últimos instantes llegó el maquillaje de Ogbeche para, al menos, romper con la sequía goleadora que había llevado al conjunto azulino a no ver puerta durante 655 minutos.