Han sido muchas las reuniones mantenidas para ver cómo se pueden afrontar esos 436.000 euros que hay que pagar y que están bloqueando los pocos ingresos disponibles por causa de un embargo. Hacienda siempre ha pedido que se abone esa cantidad de una manera inmediata, pero las últimas gestiones de los todavía rectores azulinos van en la línea de que acepten algunas garantías de pago.
El acuerdo no está cerca, pero es posible que se llegue a una vía de entendimiento, lo que permitiría terminar la temporada al quedar libre una partida importante. La confirmación debe llegar en las próximas semanas y se podría considerar como un último servicio, aunque realmente el marrón de pagar llegará para que el venga después.