Malos tiempos para el Racing Club Portuense, que ha sido descendido administrativamente a la Primera Andaluza después de no hacer frente a las deudas con los jugadores que denunciaron a la entidad por impago ante la AFE.
Para colmo, se espera una inminente disolución del club, que pese a haber quedado en mitad de la tabla del grupo X de Tercera atraviesa una grave situación institucional que conduce a la entidad a la desaparición.