La única baza que intenta trabajar Energy es que el comunicado de la LFP no habla de descenso, sino de que debe ser la RFEF "la que tome las medidas oportunas".
La intención es luchar para que el acabe llegando la ayuda al descenso de la LFP, dejando a un lado la polémica de porqué no lo ha hecho hasta el momento, y pagar con eso la deuda a los futbolistas de manera inmediata.
El tiempo corre en contra, y parece complicado que haya marcha atrás, pero Energy sigue pensando que aún no es tarde.