El jugador xerecista se encuentra muy dolorido y en el entrenamiento del viernes sabrá si tiene opciones de estar recuperado para el choque del fin de semana. "Estoy poniéndome hielo y me estoy tratando, pero no sabré si puedo jugar hasta que vea cómo voy evolucionando", afirma.
Vito reconoce que pasa por su mejor momento desde que viste la camiseta del Xerez. "Yo tenía ya muchas ganas de jugar. El míster decidió pasarme de lateral a interior y las cosas me han salido bien. Espero no tener que parar ahora por esta lesión".