David Sousa es uno de los pocos supervivientes que aún quedan en el Xerez de la eta ilusionante con Puma en el banquillo. El capitán reconoce la delicada situación por la que atraviesa el equipo y pide apoyo: "Todos los que queremos apoyar al Xerez debemos estar unidos".
El malagueño, recuperándose de un catarro que no debería perjudicarle para jugar el domingo, espera un cambio en los resultados lo más pronto posible: "Hay que ganar cuatro o cinco partidos para mantener la categoría, y cuanto antes se logren, mejor. La situación es complicada, es un equipo nuevo y hay que aceptarlo como sea".
El extremo azulino reconoce la dificultad de este mundo del fútbol y que los objetivos cambios: "Se hace una plantilla para pelear por el ascenso y el fútbol es así de difícil, que terminamos descendiendo o pasándolo mal".
Y aún recuerda a sus excompañeros: "Se va unos y vienen otros. Es complicado, sobre todo por la amistad que coge uno con la gente. Son circunstancias, muchos problemas y cada uno actúa en consecuencia".