La extraña situación del Xerez hace pensar a mucha gente que siga existiendo un nexo de unión entre el actual presidente azulino, Ricardo García, y el dueño anterior de la mayoría de acciones, Joaquín Morales. El empresario sevillano se desvincula de su paisano: "La compraventa fue clara ante notario".
Ricardo lo explica así: "Con el máximo respeto a Joaquín Morales, no creo que tenga ni para pagar sueldos a nadie. Todos habéis visto la lucha por controlar el Consejo de Administración y nosotros hicimos un sobreesfuerzo para estar en Segunda B. Nos hicieron una trampa y con el tiempo se verá".
También ha descartado Ricardo que se haga cargo del banquillo, como ya hiciera en el Jerez Industrial, en el caso de que Higuera abandone el puesto tras el partido ante el Betis B: "No lo voy a hacer, aunque ahora sí tengo el carnet de entrenador nacional. El lunes, después del partido ante el Betis B, haremos una valoración y si no se ve con fuerzas o no ve que esto lo pueda sacar, adelante hay otro tipo de entrenadores que sí lo ven".