García dice al respecto que "lo que tienen que hacer los jugadores es ganar un partido, cosa que hace mucho que no hacen. Aquí no se trata de meter presión porque esto no es un huevo que se echa a freir. La operación para que entren unos empresarios no es fácil y se hará cuando esté todo claro por las dos partes".
Reconoce que le ha dicho hoy a Higuera que su deseo es irse antes del fin de semana, "pero eso es lo que yo quiero, no sé si será posible. Estoy pendiente de que los mallorquines redacten el contrato para analizarlo con mi gente y no sé cuándo se hará eso".
Niega que la operación esté parada porque él deba mandar documentación y pone al grupo marroquí al mismo nivel que a los baleares. "Los dos están en la misma situación y se hará con el que primero lo ponga todo claro. Como es lógico, se quieren cubrir las espaldas para eludir la responsabilidad con deudas anteriores y nosotros también tenemos una responsabilidad grande si le damos entrada a otro grupo. A todo eso hay que darle forma jurídica y eso no es rápido".