De hecho, tanto el propio entrenador, 'Paquete' Higuera, como los jugadores ya hablan de lo lejana que está la permanencia, aunque no van a arrojar la toalla hasta que las matemáticas digan lo contrario. A siete puntos de la salvación a falta de 12 por jugar, el Xerez estará pendiente este fin de semana de lo que ocurra en el Pozoblanco-La Palma e intentará llegar con vida ante el Arcos, ahora quien marca la frontera entre el peligro y la tranquilidad.
Los azulinos necesitarían puntuar más que Pozoblanco y La Palma, ya que en caso de empate a puntos o triple empate sería el gran perjudicado al haber perdido los cuatro partidos ante estos rivales. Con el Arcos hubo empate en la primera vuelta (1-1) y se antoja una final en el Fernández Marchán la próxima semana, donde el Xerez llegará, si gana al San Roque, con siete puntos de desventaja a falta de nueve (el Arcos suma tres puntos esta jornada por la retirada del Ayamonte).
La mejoría ante el Cabecense y Pozoblanco son las principales bazas de los xerecistas para confiar en el milagro. La realidad es distinta, pero mientras haya vida...