En el fútbol se había visto de todo pero nada parecido a lo que ha ocurrido en un partido Real Sociedad-Marathón de la liga hondureña. El colegiado Manuel Zelaya expulsó al portero visitante Júnior Morales por tocar levemente, y con cierto cariño, el culo de Herny Martínez, delantero del equipo local. ¡¡¡Y encima pitó penalti!!!
Fue uno de los asistentes el que alertó al árbitro principal de la tremenda acción perpetuada por Morales. Los jugadores del Marathón no tardaron en pedir explicaciones a Zelay, que detuvo el partido en ese minuto 82.
Casi un cuarto de hora después, el colegiado, ante las continuas presiones de los jugadores visitantes, decidió dar por finalizado el partido con 1-1 en el marcador... sin que se lanzase el penalti.
Y estas fueron las explicaciones de lo sucedido. Así lo vio el portero implicado en este accidente: "En esa jugada yo le digo a Martínez, negrón venís con todo, tranquilo, relajate, pero le toco la parte de abajo, eso fue todo, y está pitando penal, ¿penal de dónde?.
El acta fue contundente: "Suspendo el partido definitivamente al 90+3 ya que el jugador Júnior Morales, después de ser expulsado, no quiso abandonar el terreno de juego y sus compañeros le decían que no se saliera de la cancha y no quisieron aceptar el tiro penal y la tarjeta roja. D un tiempo prudencial para reanudar el juego, pero no se dio en vista que el club Marathón se puso en rebeldía".