El Shakhtar Donetsk, campeón de la liga ucraniana, se dirigió a los dos bandos en conflicto en el este del país para pedirles el cese de los bombardeos de la ciudad, que volvieron a causar desperfectos en el estadio Donbass Arena y que ha podido costa la vida a una joven que paseaba por las inmediaciones del estadiio.
"Demandamos a todos los participantes en los combates que renuncien a la escala de tensión y entablen negociaciones de paz. Dejad de destruir nuestra ciudad. La gente y la historia no os perdonarán", señala el comunicado del club. La nota recuerda que el estadio del Shakhtar, que acogió varios partidos de la Eurocopa 2012, volvió a sufrir hoy graves daños, especialmente su fachada occidental. "La destrucción de las ciudades y de la población civil son crímenes terribles por los que todos los culpables serán castigados", denuncia. Y recuerda que el bombardeo del estadio coincidió con el reparto en la zona occidental del estadio de alimentos y productos de higiene entre los niños de la ciudad, campaña organizada por el presidente y dueño del club, el magnate Rinat Ajmétov. "Es un milagro que nadie resultara herido", añade el comunicado del club, cuyo presidente es enemigo público de los separatistas prorrusos, que se proponen expropiar sus empresas. La administración del estadio han aconsejado a la población que no se acerque a las instalaciones en su parte norte, este y oeste, ya que "no es seguro". Debido al conflicto, el Shakhtar Donetsk disputa desde marzo pasado sus partidos como local en un pequeño estadio de Kiev, hogar de su máximo rival, el Dinamo. Esto no le impidió proclamarse la temporada pasada campeón de la liga, aunque actualmente el Shakhtar es tercero a cuatro puntos del líder, el Dnipró.