Manuel Neuer, uno de los mejores porteros del momento, está creando escuela, aunque no todos sus discípulos tienen su calidad. Más bien casi ninguno. Y tanto quieren parecerse al guardameta alemán que más de uno la acaba liando. Es lo que le ha ocurrido a Vjekoslav Andri, que tardará en olvidar el día que quiso ser Neuer.
Andri, portero eslovaco del NK Radomlje, salió muy decidido hasta el centro del campo a falta de diez minutos para iniciar el ataque de su equipo... Y se lió. Un rival le robó la pelota y no tuvo más remedio que hacer falta, con la consiguiente tarjeta roja. Al final, el Radomlje cayó en su estadio por 0-2 ante el NK Krka, es último en la clasificación tras ocho derrotas consecutivas y Andri se llevó una gran bronca de su entrenador y de los seguidores.