Tino Fernández, presidente del Deportivo, celebró con lágrimas en el palco del Camp Nou la permanencia del equipo coruñés, que tuvo que levantarse de un 2-0 ante el Barcelona (2-2) para salvarse."Ha sido emocionante. Ciertamente, con el 2-0 la cosa estaba bien complicada y con el 2-2 me emocioné. Soy muy del Deportivo y vinieron las lágrimas", comentó a los periodistas tras el partido.
Fernández comparó el gol de Diogo Salomao, el del 2-2, con el que Vicente Celeiro marcó a última hora en la temporada 1987-88 y que evitó el descenso a Segunda División B, un tanto que permitió al Deportivo comenzar su mejor etapa de la historia.
"Es de esos partidos que se van a recordar mucho tiempo, el inicio de una etapa que debe ser de mejora", comentó el dirigente.
Fernández recordó que ha sido un año trágico para el Deportivo por el fallecimiento de un hincha en una reyerta con el Frente Atlético el 30 de noviembre en Madrid Río y se congratuló de que acabe con una buena noticia.
"De alguna manera podemos mirar el futuro con optimismo. Este año, quedándonos en Primera, tenemos la desgracia del asesinato de Jimmy, pero hemos mantenido la categoría y en la parte económica hemos mejorado y salvado algún 'match-ball'", sostuvo.