El presidente de la Asociación de Cronistas Deportivos de Nicaragua, Moisés Ávalos, opinó hoy que la detención de los altos cargos de la FIFA, entre ellos el expresidente de la Federación Nicaragüense de Fútbol (Fenifut), Julio Rocha, es el "escándalo deportivo más grande la historia".Ávalos dijo a Acan-Efe que Rocha hasta hoy era considerado el dirigente deportivo más grande de la historia de Nicaragua, el que "más lejos había llegado".
Rocha fue presidente de Fenifut desde 1987 hasta diciembre de 2012, cuando lo contrató la FIFA para que fuera el director de la Oficina de Desarrollo de la Confederación de Fútbol de América del Norte, de América Central y del Caribe (Concacaf)), que atiende los programas, planes y proyectos de países de habla hispana, según explicó Ávalos.
"Es un nicaragüense, afecta no solo al fútbol esa situación, sino al deporte y al país", dijo.
En este sentido, recordó que Nicaragua es el único de los 209 países afiliados a la FIFA que tiene seis Proyectos Gol ejecutados, que da la FIFA y fueron gestionados cuando Julio Rocha era presidente.
"Rocha, mientras fue presidente gestionó seis Proyectos Gol, entre ellos el estadio nacional de fútbol", apuntó Ávalos.
La Oficina Federal de Justicia (ministerio) de la Confederación Helvética confirmó que Julio Rocha se encuentra entre los siete altos dirigentes de la FIFA detenidos hoy en Suiza.
Todos los detenidos fueron arrestados por la Policía suiza a petición de la Justicia estadounidense que les acusa de organización mafiosa, fraude masivo y blanqueo de dinero, entre otros, y estarán bajo custodia helvética hasta que puedan ser extraditados.
El actual presidente de Fenifut, Jacinto Reyes, y el secretario general de la Federación, Ildefonso Agurcia, viajaron a Zúrich el pasado domingo para asistir al Congreso de la FIFA.
Los detenidos este miércoles en Suiza son el uruguayo Eugenio Figueredo, vicepresidente de la Confederación sudamericana de Fútbol (Conmebol) y vicepresidente de la FIFA; el costarricense Eduardo Li, presidente de la Federación costarricense de fútbol (Fedefutbol) y funcionario de la FIFA; el brasileño José Maria Marin, miembro ejecutivo de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol); el nicaragüense Julio Rocha; Costas Takkas, exsecretario general de la Federación de Fútbol de Islas Caimán; el británico Jeffrey Webb, presidente de la Concacaf y vicepresidente de la FIFA; y el venezolano Rafael Esquivel, presidente de la Federación venezolana de Fútbol y miembro ejecutivo de la Confederación sudamericana de fútbol (Conmebol).
El departamento de Justicia de Estados Unidos hizo público hoy un comunicado en el que anuncia que los siete detenidos, más otras personas están acusadas de "organización mafiosa, fraude masivo y blanqueo de dinero, entre otros".
La investigación penal que lleva a cabo la Fiscalía de Nueva York versa sobre la atribución de derechos mediáticos y de derechos de mercadotecnia y de patrocinio de competiciones organizadas en Estados Unidos y en América del Sur.
Según esta investigación, los acusados estarían implicados en la obtención de sobornos por valor de más de 150 millones de dólares.
La Justicia estadounidense no ha formulado cargos contra el presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, que se presenta a la reelección para un quinto mandato el próximo viernes en el Congreso de la FIFA en Zúrich.