La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) respaldó hoy las investigaciones para esclarecer las denuncias de corrupción en la FIFA, que han llevado a la detención de varios directivos de la entidad rectora del balompié mundial.
Así lo señaló Carlos Villacís, vicepresidente de la FEF, al remarcar en una entrevista radial que su organismo respalda "todas" las indagaciones en torno a los casos de corrupción denunciados y "acatará" los resultados que dejen.
"La FEF respalda todas las investigaciones que están haciendo, se respetará y acatará los resultados que arroje (sic)", indicó el vicepresidente.
"He expuesto cuál es mi criterio y en ese sentido, como opina la Conmebol y la dirigencia en pleno, espero que las investigaciones se las hagan al más alto nivel", puntualizó Villacís.
Autoridades estadounidenses y suizas presentaron cargos contra 14 personas relacionadas con la FIFA por supuestamente haber orquestado durante 24 años una trama de fraude masivo y blanqueo de dinero para enriquecerse a través del fútbol.
Entre los imputados se encuentran dos vicepresidentes de la FIFA, el uruguayo Eugenio Figueredo y el caimanés Jeffrey Webb, así como el expresidente de la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol), el paraguayo Nicolás Leoz.
Además del costarricense Eduardo Li, el nicaragüense Julio Rocha, el trinitense Jack Warner, el venezolano Rafael Esquivel, el brasileño José María Marín y el caimanés Costas Takkas.
También están los ejecutivos de empresas relacionadas con la FIFA, Alejandro Burzako, de la argentina Torneos y Competencias; Aaron Davidson, de Traffic Sports USA, y Hugo y Mariano Jinkins, del Full Play Group de Argentina.
Todos estarían implicados en la obtención de sobornos por valor de más de 150 millones de dólares, según el Departamento de Justicia de EEUU, que no ha formulado cargos contra el presidente de la FIFA, el suizo Joseph Blatter, aunque contempla citar a numerosos testigos.
Una segunda causa es consecuencia de la denuncia de la propia FIFA por sospechas de gestión desleal y lavado de dinero en relación con la elección de las sedes de los mundiales de 2018 y 2022.