Las celebraciones en Bilbao por la disputa del Athletic Club de la final de la Copa del Rey en Barcelona, han transcurrido con normalidad, han informado a EFE fuentes del Ayuntamiento.
Pese a la nueva derrota del equipo bilbaíno en tres años en una final copera frente al conjunto azulgrana, los miles de aficionados que siguieron el partido desde la capital vizcaína decidieron "celebrar" la disputa del partido y seguir la fiesta durante la madrugada.
En las horas previas a la final, las calles de Bilbao se convirtieron en un hervidero de bilbaínos y vizcaínos no todos aficionados al fútbol, ataviados con prendas rojiblancas, colores del club y de la bandera de la capital vizcaína, en señal de apoyo a los jugadores del Athletic ante un Barcelona que ya se presumía muy superior técnicamente.
La derrota por 3-1 no aguó las ganas de celebración de muchos de los aficionados, quienes decidieron prolongar la fiesta hasta bien entrada la madrugada y, los más animosos, hasta primeras horas de la mañana de hoy.
La fiesta ha transcurrido con normalidad y sin que se hayan registrado grandes incidencias más allá de cinco traslados a los centros sanitarios, cifra similar e incluso inferior, a la de un fin de semana cualquiera.
La celebración se concentró, principalmente, en la calle Licenciado Poza, cercana a San Mamés y uno de los centros neurálgicos de los festejos de las últimamente escasas victorias del Athletic.
La calle estuvo cortada al tráfico desde horas antes del inicio del partido hasta las 3 de la madrugada cuando se reabrió al tráfico al despejarse de aficionados, han señalado las mismas fuentes.