Pitos sin sanción... por ahora
La expectación que levantó la reunión del Comité Antiviolencia para proponer posibles sanciones por la pitada al himno de España en la final de la Copa del Rey de fútbol no puso punto final a un conflicto que tendrá continuidad en el tiempo a la espera del estudio de la información requerida a todas las partes.
En concreto, la Comisión solicitó a la Policía más información sobre las entidades que promovieron, indujeron o facilitaron medios materiales para dar pie a "los pitidos ofensas verbales y gestuales durante la interpretación del himno" que tanto el secretario de Estado para el Deporte, Miguel Cardenal, como el de Seguridad, Francisco Martínez, calificaron como "extraordinariamente graves".
Esa información será remitida a la Fiscalía General del Estado para evaluar la trascendencia penal de algunos de los hechos acaecidos.
"En la medida que han contribuido a que ocurrieran los hechos que hemos condenado (la pitada) las consideramos conductas completamente anti jurídicas, y, por tanto, o muy probablemente objeto de sanción", dijo Cardenal a los medios de comunicación.
En concreto, citó a los organizadores y firmantes del "Manifest per la xiulada a L'Himne Espanyol I al Rei Felipe de Borbón" y a las entidades implicadas en la distribución de objetos o medios materiales para su realización.
Antes de la final, las asociaciones Sobirania i Progrés, el sindicato CADCI, International Comission of European Citizens (ICEC) y Catalunya Acció, repartieron 10.000 silbatos entre los asistentes a la final de la Copa del Rey.
A esa conclusión principal llegó la Comisión después de una reunión que comenzó pasadas las 13.00 horas en el Consejo Superior de Deportes (CSD) y que culminó, tras una parada para comer, casi a las 19:00 horas.
Cardenal y Martínez también informaron de que solicitaran más información a los dos clubes finalistas, Barcelona y Athletic de Bilbao, y a la Federación Española de Fútbol para intentar dirimir si incurrieron en un "posible" incumplimiento del deber de asegurar la normal celebración" del encuentro.
A partir de este lunes, todas las partes tendrán cinco días para aportar los datos requeridos por la Comisión, que no descarta posibles sanciones mientras espera que llegue toda la información solicitada.
La Comisión también negó tener competencias para ejercer cualquier modificación legislativa para afrontar situaciones similares a la vivida en el Camp Nou y que protagonizaron los espectadores que silbaron el himno nacional.
Mientras, el Partido Popular, por medio de su portavoz y vicesecretario de Organización, Carlos Floriano, anunció que están estudiando y van a sugerir "una serie de cambios legales" para evitar que se repitan estas situaciones con nulas consecuencias como las simples condenas políticas y simbólicas.
Precisamente, desde el Gobierno Vasco y la Generalitat de Catalunya se mostraron en contra de una posible sanción para los dos clubes, mientras que el PSOE declaró mediante un comunicado su repulsa "por los comportamientos incívicos" que tuvieron lugar en la final de la Copa del Rey.
Habrá que esperar para vivir un nuevo capítulo sobre un hecho que eclipsó un partido de fútbol. El golazo de Messi o el doblete del Barcelona quedaron por debajo de los silbidos del público que acudió al Camp Nou. Dentro de cinco días, cuando la Comisión Antiviolencia recabe más información, el debate volverá a las instituciones. Los pitidos no han sido sancionados... por ahora.