El empresario Jordi Farré ha presentado hoy su candidatura a la presidencia del Barcelona, a cuyas elecciones concurrirá con un grupo de colaboradores con los que trabaja desde hace meses para intentar captar la idea de cambio con la que se apoyó Joan Laporta cuando alcanzó la presidencia en 2003."Nosotros representamos lo que supuso la ruptura de Joan Laporta en 2003", ha asegurado el empresario Jordi Farré, propietario de la firma 'Geek Group', y líder del colectivo 'Som Gent Normal' ('Somos gente normal'), que hace ya unos meses se puso en marcha para preparar el asalto a la presidencia.
En su sede, ubicada cerca del Camp Nou, Farré ha citado a los medios para informar de su intención de salir a recoger las 2.534 firmas que necesita para convertirse en candidato y luchar por las presidencia el próxima 18 de julio.
Acerca de la fecha escogida por la junta gestora hace dos días, y en la línea en que se expresó ayer otro precandidato (Agustí Benedito), Farré ha señalado que la decisión del órgano que ahora rige el club le ha parecido "la más antidemocrática" que se podía decidir, por lo que ha subrayado: "No me ha gustado nada".
Antes de configurarse como precandidatura, Farré quiso asegurarse de que si supera el corte de las firmas y si llega a ser presidente, el aval no iba a ser un problema, ya que el aspirante a la presidencia que resulte elegido deberá depositar ante la Liga de Fútbol Profesional un aval por el 15% del presupuesto de gastos del FC Barcelona.
"La obtención del aval ha sido de lo más fácil. El proceso ha sido similar al del 90% de las operaciones financieras: un banco gestiona un riesgo, acompañado de una aseguradora que a su vez lo reasegura", ha explicado.
Entre las propuestas que ha planteado y que irá desgranando en las próximas semanas para explicar su programa electoral, está la de remodelar el Miniestadi para hacerlo "multiusos", estudiar a fondo la remodelación del Camp Nou, implantar el voto electrónico -"aquí tenemos a dos de las empresas más importantes del mundo que gestionan esto (Scytl e Indra)", ha precisado-, e insertar "Catalunya" en la camiseta del Barça, ya que en su opinión "qué mejor embajador que nosotros".
Ante este plan sobre la camiseta, Farré tiene una idea que comparten otros aspirantes a la presidencia (Toni Freixa y Agustí Benedito), que no es otra que la de prescindir de la sociedad de Catar en la camiseta y como uno de los grandes patrocinadores del club: "Catar no es nuestra marca", ha remarcado.
El equipo de Farré ha revelado otros planes así como su idiosincrasia, y ha explicado que no pactará con nadie -"no tiene ningún sentido", ha dicho-, que el único ismo al que se acoge "es al barcelonismo", que la economía del club no puede sufrir por una reforma, en alusión a los planes sobre el Camp Nou, y que su apuesta es por una grada de animación.
A pesar de las buenas intenciones, Farré ha reconocido que la recogida de los apoyos antes del día 4 de julio (2.534 firmas) es el caballo de batalla de su colectivo.
"Es el punto más complicado. Pensamos que podremos superar el corte por la red de colaboradores que implantaremos", ha precisado el empresario, quien ha asegurado que nadie esta detrás de él y que la financiación es "con fondos propios".
Finalmente, ha lanzado un mensaje de cambio y espera que el socio "que ha madurado" dé la alternativa a una plataforma que no tenga nada que ver con el pasado.