Mientras Nacional celebra la victoria por 3-2 hoy en el clásico ante Peñarol que define el campeonato Uruguayo 2014/2015, la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) aclara en su página oficial que el partido fue suspendido siete minutos antes del fin debido a disturbios de la afición carbonera."Nacional todavía no es campeón. El Tribunal de Penas va a juntar las pruebas, la imágenes y los planteos. Ya se maneja que Peñarol va a pedir que se jueguen los siete minutos faltantes a puertas cerradas, es decir, sin la presencia de los hinchas", informaron a Efe fuentes de la AUF.
La entidad que rige el fútbol en Uruguay publicó en su cuenta de la red social Twitter y en su página web oficial que "el partido entre Nacional (3) y Peñarol (2) fue suspendido por el árbitro a falta de siete minutos para el final".
Tras un partido sufrido con derecho a empate y posibilidad de remontada, prolongación tensa y disturbios de la hinchada manya, los jugadores tricolores llegaron a ser condecorados formalmente en la cancha con medallas y con un trofeo ofrecido por uno de los auspicios del torneo.
Para los bolsos y para el público presente en el Estadio Centenario, donde se jugó el clásico, Nacional fue consagrado el campeón anual del torneo Uruguayo 2014/2015.
En su página web, el equipo tricolor afirma que con la victoria de este "domingo, que le permitió a Nacional alcanzar su título uruguayo número 45, el decano alcanzó su 13 final ganada por campeonatos uruguayos".
Por su parte, la directiva aurinegra publicó un comunicado en el que pide a sus aficionados y socios que cumplan "la normativa vigente en materia de seguridad ya que las sanciones perjudican a Peñarol y a su masa social", resaltando que esa es "la mejor forma de alentar y apoyar" al equipo.
Pese a jugar un primer tiempo tranquilo, que los tricolores cerraron confiados con dos goles, la paz terminó con el empate de Peñarol a los 90 del segundo tiempo.
Durante la prolongación, Nacional marcó el gol que considera definitorio de la disputa que, a su juicio, finalizó en 3-2.
Faltaban pocos minutos para la conclusión del clásico, cuando el árbitro pitó el tercer penalti del partido y segundo a favor de los tricolores, lo que provocó la furia manya en la tribuna.
Los hinchas aurinegros empezaron a alborotar y a tirar objetos a la policía, suspendiéndose el partido doce minutos.
En medio del alboroto, que la Guardia Metropolitana trataba de contener, el árbitro permitió el lanzamiento del penalti pendiente que fue atajado por el arquero de Peñarol.
El disturbio provocado por la afición carbonera hizo que se precipitara el fin del partido antes de que se terminara el tiempo previsto de prolongación, lo que generó la controversia sobre el resultado.
Según el sistema de puntuaciones y clasificaciones del fútbol uruguayo, en el caso de que Peñarol -ganador del Clausura- venciera el partido de este domingo, el resultado final del campeonato Uruguayo dependería de otros dos clásicos para definir el título.
Sin embargo, por liderar la tabla anual, Nacional podrá convertirse automáticamente en el campeón de la edición 2014/2015 del torneo una vez que el Tribunal de Penas ratifique su sufrida victoria de hoy.
El premio oficial de la AUF depende ahora del fallo de ese tribunal, que se basará además en un informe del árbitro para analizar si se da por concluido o no el partido y para definir posibles sanciones a Peñarol por los desmanes que causaron sus hinchas.
La expectativa es de que el tema sea zanjado lo más temprano esta semana.