El Gobierno de Chile ha decretado el estado de emergencia ambiental en la capital del país, Santiago de Chile, donde se juega gran parte de la Copa América, incluida la final de dentro de dos semanas, si bien no hay ningún peligro de que los partidos sean suspendidos.
Santiago es una de las ciudades más contaminadas del mundo y los actuales niveles de polución no se registraban desde hace 16 años. De hecho, es la primera emergencia desde 1999.
La cuestión es tan seria que el Gobierno de Michelle Bachelet ha recomendado no hacer ejercicio físico en la capital y las clases de educación física en los colegios han sido suspendidas. En Santiago hay ya altas restricciones para los coches, por ejemplo, y sólo circulan alternativamente según sus matrículas para no saturar aún más el aire. De hecho, los automóviles no preparados con dispositivos 'verdes' no pueden circular en esta ciudad.
Tras el Brasil-Venezuela, le preguntamos al brasileño Dani Alves si están notando la contaminación, y ésta fue su respuesta: "La verdad es que no hemos notado nada y mejor así, pues sería una preocupación más".